Villa el hombre gol

El espectacular rendimiento de David Villa ha despertado dos debates en torno a la figura. El primero es dónde están sus límites goleadores cuando está batiendo todos los registros de un delantero de la selección.

El segundo, en clave blaugrana, es valorar cuánto habría pedido el Valencia por su traspaso en estos momentos. En cualquier caso, nadie pone en duda que el asturiano es el delantero más eficaz de ‘la roja’ ni cuestiona que los 40 millones pagados por el Barça son una cifra excelente.

Las estadísticas avalan a Villa, que ha marcado cinco de los seis tantos de España en el presente Mundial y que, tras el tropiezo de la primera jornada frente a Suiza, ha ‘mojado’ frente a Honduras (2), Chile, Portugal y Paraguay. Promedia una diana por encuentro pese a fallar un penalty y enviar un remate al larguero y su eficacia queda demostrada pues el 22% de sus 23 disparos han conseguido el objetivo.

Si el juego colectivo de ‘la roja’ impulsado por los ‘pequeños’ es su seña de identidad, el instinto rematador de David ha permitido que ese fútbol de toque se traduzca en victorias.

Catalogado como ‘Rey Midas’ o ‘Maravilla’ por la crítica debido a su tremenda eficacia goleadora, su perfecta conexión con los que esta temporada serán sus compañeros en el Barça está más que probada.

La eléctrica combinación con Iniesta y Xavi en el gol del triunfo frente a Portugal es un ejemplo claro. La ‘gent blaugrana’ ya sueña con ver a David enfundado en su camiseta repitiendo esta conexión y mejorando incluso sus magníficos registros con el Valencia. Sus 211 tantos en 383 partidos como profesional en Primera División resultan inapelables. Finalizado el Mundial, le restará el reto de sumar títulos a nivel de clubs.

“Ojalá pueda lograrlo”, confesaba el flamante delantero del Barça cuando le preguntaban por el ‘pichichi’ de Sudáfrica 2010, “pero lo que importa es el juego colectivo”, añadía para ratificar que la clave está en el grupo. Pese a todo, los resultados ajustados de todos los encuentros han dado un valor añadido a sus dianas.

“Cuando ganas por goleada no tienen el mismo valor que los que estoy consiguiendo en este Mundial, que están sirviendo para que la selección vaya ganando”.

Tras el éxito de la Eurocopa 2008, en la que Villa ya se convirtió en el máximo realizador con cuatro dianas, España ha roto una nueva barrera psicológica al superar los cuartos de final y colocarse entre los cuatro mejores equipos del mundo. Una vez más, como ha sucedido con el Barça y sus estrellas, los éxitos del conjunto de Vicente del Bosque se asocian a los méritos individuales de sus futbolistas y se retroalimentan.

Villa llegará a can Barça en su plena madurez futbolística, reconocido por fin como uno de los mejores arietes y con una hoja de servicios espectacular a nivel de la selección. Es el primer delantero que consigue marcar en cuatro partidos consecutivos de una fase final -ningún otro lo había conseguido desde Rivaldo en el Mundial de Corea y Japón 2002.

Y por el momento, ya es el máximo goleador español en una fase final con ocho tantos en nueve encuentros, superando a Emilio Butragueño.

Esas cifras le sitúan al nivel de delanteros del calibre de los brasileños Leónidas y Rivaldo, del bombardero alemán Voeller o de un mito como Maradona y ya le quedan a tiro a Vieri, Vavá o Rossi.

A nivel doméstico, en la semifinal contra Alemania puede superar a otro mito del imaginario español, a Raúl González. Si tras el Mundial de Alemania 2006 heredó el ‘número siete’ del todavía capitán del Real Madrid, ahora puede arrebatarle la condición de máximo goleador absoluto. El 0-1 contra Paraguay es su diana número 43 en 63 internacionalidades, mientras que Raúl se quedó en 44 tras disputar 102 encuentros.

Hambre de records

Tras el duelo frente a los paraguayos, un Villa radiante de felicidad volvía a hablar del colectivo antes de pensar en sí mismo pues resaltaba la importancia de haber derribado el muro de los cuartos de final que siempre había resultado infranqueable para la selección. “Tenemos otro récord del fútbol para nuestro país. Estoy muy contento por la afición que siempre ha estado con nosotros y ahora queremos brindarles un gran partido y llegar a la final”.

Todo un desafío para España y para un Villa que en la Eurocopa de Suiza y Austria se perdió la final del Prater de Viena, precisamente contra Alemania, a causa de una lesión. “Si no pasa nada raro estos días, esta vez sí podré jugar contra Alemania”, predecía el ‘guaje’ que iba más allá y confesaba que “sinceramente, lo que quiero es jugar la final”. David preve el miércoles un encuentro más complicado que el de la final de la Eurocopa una vez que Joachim Löw ha renovado a fondo su equipo apostando por la juventud. Aun así, la madurez futbolística del ‘guaje’ y sus compañeros puede ser decisiva.